La venganza

Miré para un lado y el otro, no había nadie cerca, debía de tener cuidado si no quería que nadie se diera cuenta.

Miré nuevamente solo para estar seguro, no había nadie así que seguí hasta la habitación de Asriel. Si no recordaba mal lo que buscaba estaba en el baúl, me dirigí hasta su cama, y abrí el baúl que se encontraba en los pies de la misma.

- Aghh, son demasiadas cosas las que ese mocoso guarda… Bien, tendré que sacar todo esto. - Suspiré

Empecé a sacar una gran cantidad de hojas, poco después encontré libros que debí quitar también, habían unas cuantas herramientas, una bolsa con material para coser, y unas cuantas cosas más -.-U… Después de sacar todo eso miré el fondo del baúl, si no recordaba mal eran tres, no, dos golpes los que debía dar… Los dí esperando que fuera así, efectivamente, el pequeño compartimiento secreto se abrió, dejando al descubierto un pequeño oso de color azul el cuál pertenecía a ese mocoso ¬¬. Tome el peluche azul, en su lugar coloque una pequeña nota:

“Mocoso, tendrás que buscar tu gran tesoro, nunca te vuelvas a comer mis gomitas ¬¬ Aion”

Volví a cerrar el compartimiento con el papel dentro, coloque todo lo que había retirado del baúl, tratando de que quedara tal como estaba antes, cerré el baúl y salí de la habitación con el oso azul en mi mano…

Jeje, ese mocoso no tiene idea de que conozco su secreto, hace unos días lo estaba observando cuidadosamente para buscar su debilidad, algo que me permitiera vengarme, cuando mire que entraba en su habitación y sacaba todo de su baúl, me pareció curioso por lo que seguí mirando, note que daba unos golpes al fondo y luego sacaba el peluche azul, además de lo necesario para repararlo, espero que esto le sirva de lección... ahora… ¿Dónde esconderé el oso?? … Mmm… lo tengo, creo nunca lo encontrará en ese lugar.

Después de esconder el pequeño peluche fui a la sala donde me senté a esperar a que el mocoso se diera cuenta de mi pequeña venganza… y a todo esto… ¿Dónde estará mi pequeña Faer?... Mmm… me gustaría verla después de nuestra plática…

Creo iré a buscarla… Me levante y me dispuse a buscarla.